Él me da fuerzas.

Él que había llegado por casualidad, lleno toda mi vida con su sonrisa y con sus besos, yo que siempre lloraba noche tras noche pensando que no lo tenía, ahora me duermo con la sonrisa en la cara tras leer sus mensajes de buenas noches. Y esque ahora me siento feliz, feliz como hacía mucho que no me sentía, pero también como hacía mucho tiempo que merecia estarlo. Estoy feliz porque tengo a alguien con quien compartirlo, yo la persona más independiente del mundo, la persona que más odiaba las relaciones serias y a la que le gustaba vivir la vida, y tenía chicos de usar y tirar, para llenar el vacio de su corazón, y que tonta hubiera sido si no le hubiera dicho sí. Pero siempre dijeron eso del que no arriesga no gana, y esta vez toco gano, y el premio fue por todo lo alto. Estoy orgullosa de mi misma y no me arrepiento de nada de lo que he echo estos dos últimos meses. He llegado a olvidar a una persona la cual nunca me creí capaz de hacerlo, parece que me subestime, he llegado a una conclusion clara, te quiero, y no hay más, no tengo más que decirte, más cosas que contarte, solo necesito esa sonrisa después de un beso que me da fuerzas para seguir.